1. Practica deporte (y si es en equipo mejor)

La práctica de deporte o ejercicio físico (también vale andar rápido) aumenta los niveles de serotonina. Está más que demostrado. Pero claro, la teoría es muy fácil y cuando nos sentimos tristes o estamos en un proceso depresivo igual no es lo que más nos apetece, ¿verdad? 

Bueno, pues aunque te resulte difícil te animo a que empieces a moverte (aunque sea un poco y sin ganas). A veces las ganas se hacen haciendo. Te aseguro que cuando termines te sentirás mejor, y en algún momento hay que romper ese círculo en el que estamos.

Una variante es bailar. Dicen que la música eleva el alma. Pues doblemente si movemos el cuerpo. Así que ponte una música que te guste, levántate y mueve los músculos de tu cuerpo.

Además si puedes hacer deporte o bailar en compañía mucho mejor. 

La socialización además de animarnos cuando estamos haciendo deporte tiene un beneficio “extra”. 

Cuando una persona se siente triste o deprimida (ya sé que no es lo mismo pero para lo que estoy contando lo voy a utilizar así), la tendencia natural es aislarnos, y para romper el círculo vicioso salir en el que podemos entrar, rodearnos de gente ayuda también a elevar nuestro estado emocional.

2.  Come de manera saludable

Otro factor que influye de manera determinante en nuestra salud y también en nuestro estado de ánimo es la alimentación.

Pero si nuestros niveles de serotonina están bajos podemos elevarlos comiendo alimentos ricos en triptófano, que es precursor de la serotonina. 

Muchos de estos alimentos son también ricos en vitamina D, que también ayuda a al aumento de la serotonina. Así que un tiro, dos pájaros. 

Ahhh!! Y otra forma fácil y barata de aumentar la vitamina D es que te de el Sol. 

Uno de los problemas de pasar tanto tiempo en las oficinas trabajando es que cuando entramos y salimos sin sol. Así que no recibimos la dosis diaria de sol para ayudarnos a sintetizar la vitamina D. Así que si puedes escaparte de la oficina (después de comer) y darte un paseito, te vendrá muy bien también.

Algunos de estos alimentos son:

• El chocolate negro.
• El salmón.
• La piña.
• Los tomates.
• La carne baja en grasas
• Los frutos secos (especialmente las nueces).
• El huevo.
• Las legumbres (en especial los garbanzos).
• La leche y derivados.
• Los cereales integrales.

Y si además te gusta cocinar, puedes pasar un rato entretenido.

3. Meditación (Mindfulness) para aumentar la serotonina

Si has llegado hasta mi blog, ya me imagino que sabrás que soy profesora de Mindfulness y especialista en programa de Mindfulness (MBCT) específico para la gestión de la ansiedad y la evitación de depresiones recurrentes.

Está más que comprobado que la meditación Mindfulness aumenta los niveles de serotonina y ayuda a la regulación emocional. Así que te animo a que te dediques un ti. Puedes comenzar con algunas de las meditaciones gratuitas que te ofrezco en mi web.

Pero si quieres profundizar más te animo a que te unas a alguno de los cursos que  imparto.

En el programa de Mindfulness MBCT además de realizar prácticas formales de meditación de enseñaré a que tomes conciencia de la importancia del autocuidado y de no esperar a estar muy mal.